Inhabilitan dos años al sacerdote del Pare Manyanet que tenía pornografía infantil

El juzgado del Penal número 19 de Barcelona ha condenado al sacerdote de la Congregación de Hijos de la Sagrada Familia P. J. C. a dos años de inhabilitación. 

¿Por qué es importante? La Fundación Vicki Bernadet hizo público a finales de 2022 que 1 de cada 5 menores de 17 años ha sido víctima de agresiones sexuales. Una cifra que representa la mitad del total de los abusos de esta tipología cometidos.

A fondo: El religioso fue denunciado por un informático del Colegio Pare Manyanet para tener pornografía infantil en el ordenador. 

• Ahora, el sacerdote queda inhabilitado para "cualquier profesión u oficio, retribuido o no, que comporte contacto regular y directo con menores". Al mismo tiempo, la sentencia le impone nueve meses de multa con una cuota diaria de seis euros. 
• El texto confirma que el sacerdote había descargado fotos y vídeos de menores desnudos y descarta que el material fuera producido por él o compartido con terceros. 

¿Qué dicen? La Congregación de Hijos de la Sagrada Familia afirma en un comunicado que...

• El exrector de la parroquia de Sant Josep Manyanet del barrio de Sant Andreu de Barcelona "no ha sido nunca acusado, investigado o condenado por ningún delito vinculado al abuso de menores, intimidación, ni por ninguna actitud inapropiada, ni ninguna otra circunstancia vinculada a su tarea pastoral".
• Que desde el momento de la denuncia se apartó el religioso de las responsabilidades pastorales y se abrió un proceso canónico, y que se dictaron como medidas cautelares la prohibición de cualquier actividad pastoral, de celebrar culto en público de cualquier contacto con menores, a la espera de la resolución judicial.

Mientras tanto: Una vez conocida la sentencia, la congregación la ha comunicado al tribunal eclesiástico que hace la investigación canónica y, a la espera de la resolución correspondiente, mantiene las medidas cautelares mencionadas.

Además: Hay que recordar que los hijos de la Sagrada Familia expedientaron al informático que denunció el caso. La congregación justificó que lo hacía "no para que hiciera la denuncia, ya que era su deber, sino porque se consideró que tendría que haber informado, al mismo tiempo, a la dirección de la escuela".

Para acabar: Por todo ello se le condena por un delito de posesión de pornografía infantil. El condenado no apelará la sentencia.