Rodolfo Sancho, por fin en Tailandia: el motivo por el que ha retrasado tanto el viaje

Un mes después de que su hijo Daniel fuera encarcelado en Tailandia por asesinato, Rodolfo Sancho ha viajado por fin este fin de semana al país. El actor fue visto el sábado en el aeropuerto de Madrid antes de coger un avión con destino al sureste asiático.

¿Qué sabemos? Mientras su exmujer y madre del asesino confeso, Silvia Bronchalo, está en Tailandia desde mediados de agosto, Rodolfo Sancho ha aterrizado en las últimas horas. Según han apuntado desde el programa Fiesta de Telecinco, el motivo de haber retrasado tanto el viaje es estrictamente económico, por la gran inversión de dinero que suponen los vuelos, la estancia en el país y los abogados que llevan el caso.

Al detalle: Según el programa de Emma García, Rodolfo Sancho ha pasado las últimas semanas negociando con varias entidades bancarias para conseguir una liquidez financiera suficiente para hacer frente a los gastos.

En cifras: Entre el grueso de dinero que tiene que desembolsar la familia de Daniel Sancho durante su estancia en la prisión estarían los 100.000 euros que según Fiesta estarían cobrando los abogados tailandeses. Hay que añadir los 10.000 euros de los abogados en España, y la posible indemnización de 500.000 euros que estudia pedir la familia de la víctima, Edwin Arrieta. Además están los vuelos, en torno a unos 1.500 euros para ir y volver, las noches de hotel –que pueden elevar la cifra a unos 2.000 euros por cada viaje– y los ingresos a su hijo para que compre comida, con un máximo de 400 euros al mes.

Otro apunte: Después de 13 horas de vuelo desde Madrid, Rodolfo Sancho aterrizaba este fin de semana en el aeropuerto de Bangkok sin hacer declaraciones a los medios de comunicación. Todavía no ha visto a su hijo en persona (sí que lo ha hecho a través de videollamada), y parece que el momento del reencuentro será finalmente este miércoles. Se espera que el actor responda a la prensa por primera vez aquel mismo día cuando salga de la prisión de Koh Samui.