Opinión
David Mejía Ayra
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opinión

Cordones sanitarios

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Esquerra Republicana ha propuesto de cara a las próximas elecciones municipales un cordón sanitario hacia los partidos Ciudadanos, PP, VOX y Valents entre otros. Nuevamente, esta forma de hacer política vuelve a la carga para intentar crear bloques y división entre la sociedad.

Este juego al que pretenden llevar a nuestras instituciones y a nuestros municipios es realmente peligroso

Esta propuesta maquillada contra un supuesto discurso de odio evidencia, sin duda alguna, la falta de calidad democrática que algunos abanderados de la democracia utilizan de manera recurrente frente aquellos que no piensan como sus estándares puristas determinan.

Dicen que aquellos que quieran suscribir la propuesta, estarán comprometidos con la lucha antifascista, pero la realidad es que quien demuestra actitudes poco comprometidas frente a la pluralidad de la sociedad son ellos mismos.

Si el fascismo, se caracteriza por juzgar sistemáticamente a la gente no por su responsabilidad personal, sino por la pertenencia a un grupo, entonces aquellos que se declaran antifascistas, con propuestas como la presentada por el partido republicano, utilizan métodos y actitudes fascistas para dividir a la sociedad.

Las elecciones municipales son un ejemplo magnificado de como lo importante para los vecinos y vecinas de las diferentes ciudades no son las siglas de sus gobernantes, sino las propuestas que estos tienen para mejorar sus municipios.

Parece inverosímil que en un país democrático donde los partidos existentes cumplen las reglas constitucionales, algunos, como en este caso Esquerra, que probablemente tendrá el apoyo de otras formaciones como Junts o la CUP, se crean con un poder supremacista para definir quienes son los buenos o los malos. Precisamente utilizando discursos y políticas que ellos critican de los “supuestos” fascistas.

La falta de calidad democrática que algunos abanderados de la democracia utilizan de manera recurrente frente aquellos que no piensan como sus estándares puristas determinan

Este juego al que pretenden llevar a nuestras instituciones y a nuestros municipios es realmente peligroso en cuanto a los principios básicos de cualquier democracia occidental. La historia nos ha enseñado todo aquello que no se debe hacer para avanzar como sociedad, y tristemente, parece que algunos prefieren seguir con sus tácticas partidistas en vez de buscar los puntos importantes para avanzar en la buena dirección.