Opinión
David Mejía Ayra
Tiempo de lectura: 2 minutos
opinión

Kings League

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El pasado fin de semana pudimos ver en Barcelona un evento que sin duda tiene una gran capacidad de movilización. La Kings League, creada entre otros por Gerard Piqué, se ha convertido en un fenómeno de masas que traspasa cualquier frontera y que debería hacer replantear seriamente otros formatos deportivos o de cualquier ámbito social.

El talento y la visión no entiende de lenguas ni de territorios. Si somos capaces de ver que iniciativas como la Kings League dan un plus a la ciudad de Barcelona

Esta nueva liga, que combina deporte con ocio y diversión ha sabido captar la atención de los adolescentes tanto a nivel nacional como internacional. Unir las figuras de éxito del mundo futbolístico con aquellos personajes famosos para muchos de nuestros jóvenes, ha convertido esta iniciativa en un concepto que puede llegar a la mayoría de pantallas de una manera abrumadora.

Reunir a más de 90.000 personas en el Spotify Camp Nou y tener un seguimiento en redes sociales de millones de personas por streaming (especialmente de España y Latinoamérica) es, sin duda alguna, un éxito sin precedentes.

Aquellos que no acepten la velocidad de cambio en la que se mueve el mundo actual pueden acabar chocando contra la realidad y perder el potencial conseguido hasta este momento. Intentar desprestigiar estos nuevos formatos llamándolo circo u otros adjetivos negativos puede jugar en su contra y acabar perdiendo la batalla del negocio.

De la misma forma, todos los que critican el idioma en el que se desarrolla la nueva liga, obviamente en español por su potencialidad a nivel de usuarios, acabarán como siempre, desprestigiando muchas de las iniciativas exitosas que nacen en nuestra tierra.

El talento y la visión no entiende de lenguas ni de territorios. Si somos capaces de ver que iniciativas como la Kings League dan un plus a la ciudad de Barcelona que se puede aprovechar de muchas maneras y desde muchos sectores distintos, quizás conseguiremos volver a recuperar todo lo destruido por años de obsesión independentista.

Aquellos que no acepten la velocidad de cambio en la que se mueve el mundo actual pueden acabar chocando contra la realidad y perder el potencial conseguido hasta este momento

Veremos cómo sigue evolucionando este nuevo proyecto, pero a día de hoy podemos afirmar que los nuevos formatos han llegado a nuestras vidas para quedarse. O evolucionamos con ellos o nos quedaremos en la nostalgia del pasado.