Ningún gran país de la UE sigue a Sánchez con el reconocimiento de Palestina

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se está quedando prácticamente solo en su firmeza de reconocer al Estado de Palestina antes del verano. El mandatario español ya adelantó que el Consejo de Ministros lo hará con o sin acuerdo de los Estados miembros. Sin embargo, para evitar un movimiento diplomático unilateral de esa magnitud, Sánchez ha intentado convencer a los veintisiete sin éxito. El último país en rechazar su idea, este lunes, fue Portugal.

¿Qué sabemos? En pleno conflicto entre Israel y Palestina, Pedro Sánchez ha abanderado el discurso del reconocimiento de ambos estados. De ahí que en los últimos días haya realizado dos giras internacionales, por Oriente Medio y Europa, para buscar un consenso entre los países árabes para que reconozcan a Israel y entre los europeos para que reconozcan Palestina.

Hasta ahora. Pese a las buenas intenciones, y los reconocimientos -sobre todo por parte del pueblo palestino hacia su labor-, Sánchez no está consiguiendo los frutos que deseaba. Arabia Saudí, país que visitó hace dos semanas, no está mucho por la idea de establecer relaciones diplomáticas con Israel. Lo mismo ocurre, en el caso de Francia o Alemania, dos de los principales países de la Unión Europea, con Palestina.

Sin embargo. Pese al rechazo del francés Emmanuel Macron y del alemán Olaf Scholz de hacer caso a la petición de Sánchez de reconocer el estado palestino en la mayor brevedad posible, otros países europeos como Irlanda, Malta, Eslovenia o Noruega si se han mostrado dispuestos a estudiarlo. Pero en el caso noruego su primer ministro rechazó las prisas de Pedro Sánchez de hacerlo antes del verano. "Es importante las formas y el cuándo" espetó, este viernes, junto a Sánchez. El nuevo primer ministro portugués, Luis Montenegro, con el que se reunió este lunes en la Moncloa, también rechazó dar ese paso por ahora.

¿Qué esperar? Aunque este miércoles y este jueves hay reunión del Consejo Europeo, el órgano que reúne a todos los jefes de Estado y de Gobierno en Bruselas, no se esperan avances en este sentido. El rechazo de los grandes estados miembros a reconocer a Palestina aboca la propuesta de Sánchez a la marginalidad ya los países que la adopten a hacerlo prácticamente de forma unilateral, al margen de la diplomacia comunitaria.