Hacia la reforma de sedición: equiparación con Europa y mejoras para los exiliados

La reforma del delito de sedición vuelve al epicentro de la vida política. En plena negociación de los presupuestos del Estado, el PSOE se plantea reducir las penas a la mitad y homologarlo al resto de Europa. En España está castigado con hasta 15 años de prisión, mientras la media europea es de 6.

¿Por qué es importante? La reforma podría ayudar a algunos de los exiliados y encausados para el 1 de octubre a reducir las condenas. Además, políticamente, sería una victoria relevante para Esquerra, porque se empezarían a ver frutos de su apuesta por el diálogo con el Estado.

¿De dónde venimos? Casi tres años después de que ERC y el PSOE pactaran una mesa de diálogo sobre el conflicto catalán, los socialistas sacan polvo a esta propuesta coincidiendo con la negociación de los presupuestos del Estado. A pesar de eso, los dos partidos quieren desvincular las dos negociaciones.

• En la mesa de diálogo del mes de julio pasado, se acordó avanzar en la desjudicialización del proceso. El gobierno español prometió avances antes de finales de año. 

¿Qué es? Según el artículo 554 del Código Penal, es sedición "alzarse pública y tumultuosamente para impedir, por la fuerza o fuera de las vías legales, la aplicación de las leyes" o impedir a la autoridad "el legítimo ejercicio de las funciones".

• Penas: de 8 a 10 años, y de 10 a 15 en caso de que los acusados sean autoridades. 

A la práctica: La reforma del delito de sedición tiene limitaciones considerables con respecto a la desjudicialización. Podría beneficiar a algunos de los exiliados, pero quedaría muy lejos de ser una solución definitiva, porque muchos de los todavía encausados para el 1 de octubre están acusados también de malversación. 

• Quien seguro que se podría beneficiar es la secretaria general de ERC, Marta Rovira, acusada solo de sedición porque no formaba parte del Govern.
• No es el mismo caso que Carles Puigdemont, a quien la justicia española también reclama por malversación. Podría ver reducida la pena de prisión, pero no se libraría.
• Tampoco serviría para la mayoría de los altos cargos investigados por el juzgado número 13 de Barcelona. En esta situación hay, por ejemplo, los diputados de ERC Josep Maria Jové y Lluís Salvador, que están acusados de malversación, desobediencia y revelación de secretos. 

Visión global: ¿Cómo es el delito de sedición en el resto de Europa?

Es difícilmente comparable, porque cada país tiene su propio Código Penal y no hay ningún delito directamente equiparable. Además, en todos los casos, exige el uso de la violencia. 

• Italia: los delitos de resistencia imponen penas de seis meses a cinco años de prisión. 
• Alemania: la resistencia y los desórdenes públicos pueden llegar a condenas de hasta tres años de prisión, pero tiene que haber violencia. 
• Suiza: los delitos contra el Estado o la Constitución son de menos de un año, pero si la resistencia se considera grave se puede llegar a castigar con hasta tres años. Sería aplicable en casos de alzamiento.
• Francia: se castiga con dos años de prisión, con tres si es con grupo. 
• Portugal: es el país con las penas más elevadas, de hasta casi ocho años.

Contexto: Organismos internacionales, como el Consejo de Europa o Amnistía Internacional, han pedido a España esta homologación europea del delito.

¿Qué dicen el resto de partidos? 

• La posible reforma ha vuelto a generar tensiones dentro del independentismo. Mientras Junts pide una derogación total del delito, ERC evita pronunciarse sobre como cree que tendría que quedar este delito en el Código Penal. No quieren convertir la negociación en una subasta pública que complique todavía más el acuerdo.
• En el otro extremo, el PP ya ha acusado a Pedro Sánchez de "traición" a España. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado que el gobierno español "entrega los intereses del país una vez tras otra" a los "enemigos confesos de España" por "beneficio propio". 

¿Qué esperar? Una eventual reforma del delito de sedición necesitaría una mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados. 

• Se podría sacar adelante con el apoyo de PSOE y Podemos, además de los partidos independentistas. Si Junts y la CUP quisieran votar en contra por insuficiente, también podría salir adelante con el PDeCat –que ya se ha mostrado a favor– y Bildu. También podría votar a favor el PNV.