Política
Ignacio Garriga, líder de la formación de extrema derecha Vox en Catalunya
Foto: Ignacio Garriga, líder de la formación de extrema derecha Vox en Catalunya | Europa Press
Extrema derecha

La propuesta de ERC y CUP para castigar los discursos de odio de Vox en el Parlament

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Ignacio Garriga, líder de la formación de extrema derecha Vox en Catalunya
Foto: Ignacio Garriga, líder de la formación de extrema derecha Vox en Catalunya | Europa Press

Esquerra Republicana (ERC) y la CUP proponen una reforma exprés del reglamento del Parlament para castigar los presuntos discursos de odio de Vox al Parlamento de Catalunya.

¿Por qué es importante? Los mensajes contra los migrantes, que el partido de extrema derecha relaciona constante y erróneamente con el aumento de la delincuencia y la criminalidad, son una de sus constantes en la cámara catalana y a las instituciones donde tienen representación en España.

Contexto: Como ejemplo, la presidenta en funciones, Alba Vergés, llamó al orden al líder de Vox en Catalunya, Ignacio Garriga, cuando este hablaba de una presunta agresión sexual en Salou durante el último pleno.

  • El presidente del grupo de extrema derecha en la cámara dijo que "tres pakistaníes y un marroquí atacaron a una niña de 13 años", insistiendo varias veces en las nacionalidades de los detenidos, a pesar de las advertencias de Vergés, que finalmente le amenazó con retirarle la palabra.

A fondo: ERC y la CUP presentarán los próximos días una iniciativa para intentar frenar estos tipos de discursos, según ha adelantado El Periódico este viernes 7 de abril. De esta forma, el texto quiere...

  • Que el reglamento prohíba y sancione los "discursos de odio o intolerantes", los mensajes que "inciten a la discriminación en razón de género, orientación sexual, creencias, ideología, origen, condición social, etnia, lengua o discapacidad". Actualmente, el presidente de la cámara puede expulsar a diputados por "palabras ofensivas dirigidas a instituciones públicas, otro miembro del Parlament o cualquier otra persona," una indicación demasiado amplia, aseguran.
  • Que los diputados que no firmen la declaración de compromiso de tolerancia cero ante la discriminación y el acoso no puedan tener cargos en la cámara o sus órganos. Vox no se adhirió al manifiesto, aunque tampoco forma parte de la Mesa ni preside ninguna comisión, pero esto es gracias al hecho que el resto de partidos quisieron aislarlos.
  • Cambiar la unanimidad necesaria para emitir declaraciones institucionales por una mayoría cualificada. Como la extrema derecha se opone a todos los textos planteados sobre derechos humanos o contra la violencia machista, el Parlament no ha hecho ninguna declaración institucional desde 2020. ERC y la CUP quieren que solo haga falta el voto a favor de dos terceras partes de la cámara, y no de toda.

Además: Republicanos y cupaires aprovechan y proponen también una vía para regularizar el voto telemático del diputado de Junts Lluís Puig desde Bélgica.

  • Quieren incluir la modalidad telemática a las votaciones en "situaciones de especial gravedad" y siempre que la Mesa dé el visto bueno. Al mismo tiempo, proponen permitir el voto telemático cuando los diputados se encuentren en el extranjero en representación del Parlament en momentos determinados.
  • También sugieren ampliar la delegación de voto de igual forma en situaciones excepcionales, y asimismo con la autorización de la Mesa. Actualmente, esta es una opción exclusiva para casos de hospitalización, enfermedad grave o incapacidad prolongada.

Mientras tanto: La cámara todavía tiene que decidir sobre la presidencia suspendida de Laura Borràs, condenada por corrupción. El PSC ha registrado esta semana una propuesta para reformar el reglamento del Parlament y permitir el cese de la dirigente de Junts.