El PP exhibe músculo antes de la investidura que Feijóo da por perdida

El Partido Popular ha exhibido músculo antes de la investidura del presidente popular, Alberto Núñez-Feijóo, que ellos mismos ya dan por perdida. "Nos faltarán cuatro votos, pero tenemos el apoyo de la calle", han proclamado ante más de 40.000 personas, según la policía, que se reunieron ayer en Madrid convocadas a protestar contra la amnistía que está negociando al PSOE con el independentismo.

¿Por qué es importante? Los populares consiguieron ayer hacer la movilización mayor de la historia convocada por un partido, llenando la plaza Felipe II hasta los topes.

En profundidad: Según la policía 40.000 personas, según los organizadores más 65.000 manifestantes, asistieron ayer al acto del Partido Popular, donde participaron los expresidentes españoles José María Aznar y Mariano Rajoy.

• Se trataría de una demostración de fuerza y músculo a menos de 48 horas de la investidura que Feijóo, a priori, perderá por falta de 4 votos y que pondrá en bandeja de plata a Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, la oportunidad de volver a ser presidente de España, esta vez con el apoyo de todos los partidos independentistas a cambio de una ley de amnistía.
• Aunque los populares asumen la derrota, han querido exhibir el gran apoyo que las calles les dan para "defender la dignidad de la nación" ante las supuestas concesiones a los nacionalistas. Un mitin que ha servido para levantar los ánimos a un candidato que no ha cumplido las expectativas de derrotar el 'sanchisme' y hacer devolver España a la senda de la mano dura contra Catalunya.

¿Qué dijeron? Feijóo tildó de "cacicada" e "indignidad" la eventual amnistía a los líderes del Proceso, delante de una plaza llena de pancartas y camisetas que exigían el encarcelamiento del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont e insultaban a Sánchez. El líder del PP aseguró que el PSOE ya no es "un partido de Estado" y volvió a agitar el transfuguismo para salvar España de las garras del independentismo.

• Después y antes de cada discurso de cada dirigente popular, toda la avenida Felipe II se inundaba bajo el grito de guerra: "Puigdemont, en la prisión"!. "Estamos dispuestos a movilizar todos los esfuerzos por evitar que se consume un ataque sin precedentes al marco de la convivencia de todos los españoles", proclamó Aznar contra la amnistía.