¿Qué puedes hacer ante las miradas acosadoras de hombres en el gimnasio?

El acoso en los gimnasios es una realidad nada anecdótica, pero invisibilizada. La cosificación de la mujer y la sexualización del deporte son problemas que afectan a muchas usuarias de centros deportivos, solo hay que sacar el tema en un grupo de mujeres para comprobar que la mayoría se han sentido incómodas en el gimnasio al ser observadas por hombres. Si bien, y como pasa con la mayoría de violencias contra la mujer, las denuncias no reflejan la realidad.

¿Por qué es importante? Unas 7 de cada 10 mujeres aseguran haber vivido situaciones intimidatorias en el gimnasio, según datos de un estudio de la empresa Fijo Rated sobre acoso sexual en los gimnasios. Todavía son pocos los datos específicos sobre esta realidad.

Contexto: Existe un hashtag viral en Tiktok, #GymCreep (Asqueroso del gimnasio), con que más de dos millones de mujeres compartieron el acoso que estaban sufriendo en el gimnasio.

• Las mujeres se grababan mientras entrenaban para registrar a los hombres que las miraban y lo compartían en las redes sociales.
• La cantidad de vídeos fue tal que se consideró un #MeToo de los gimnasios en Estados Unidos.

@songetac It’s actually annoying, the last time I tried to expose this guy tiktok took it down #gym #cantstretchinpeace #creepy #fyp #lafitness ♬ Somebody's Watching Me - Rockwell

@ednaly.meza Like I get it, it’s impossible not to look but that’s TOO much🤮 #creepy #gymtok #viral ♬ Forever - Labrinth

En datos: El estudio de la empresa Fijo Rated expone que prácticamente todas las mujeres se sienten incómodas si alguien las mira mientras hacen deporte.

• En consecuencia, una de cada cuatro mujeres deja de ir al gimnasio, un 40% cambia de centro y dos de cada tres empiezan a utilizar auriculares para aislarse de la situación.
• Solo un 8% ha confrontado al acosador que las está mirando fijamente mientras entrenan.

¿En respuesta? El miedo a la incomprensión, el miedo al acosador, y la vergüenza, son solo algunas de las variables que influyen al hecho que las mujeres no denuncien.

• Por eso es importante conocer los mecanismos que tienen los gimnasios para hacer frente a estas situaciones.

En detalle: Existen diferentes protocolos elaborados por el Ayuntamiento de Barcelona que aplican a todos los centros deportivos municipales. Estos protocolos tienen una parte importante dedicada a la prevención y, por lo tanto, determinan qué tiene que hacer el CEM para prevenir que se produzca violencia en su centro.

• El Protocolo para la prevención, la detección y la acción contra violencias sexuales hacia personas adultas en los equipamientos deportivos municipales recoge específicamente que "mirar lascivamente el cuerpo" es acoso sexual no verbal.
• Este protocolo establece que identificar situaciones de riesgo, como entrevistas en espacios cerrados, y crear normas internas, son medidas para reducir las situaciones de riesgo. Contempla una larga lista.
• Además, dice que "los equipamientos tienen que facilitar al máximo la visibilidad de los espacios de actividad y de los servicios complementarios y permitir la transparencia como factor de prevención".
• El documento explica, también, cómo tiene que reaccionar y a quién puede contactar el gimnasio en caso de recibir una denuncia por un caso de acoso en sus instalaciones.

También existe el Protocolo para la prevención, detección y acción de los maltratos y de las violencias sexuales a niños y adolescentes.

• Contempla acciones preventivas como facilitar la visibilidad para facilitar la detección, las actividades con niños se tienen que hacer en espacios visibles, y respetar la voluntad de los niños y adolescentes, sobre todo en actividades de contacto, entre otras medidas.

Además, muchos CEMs están inscritos en el Circuito contra la violencia machista y el Circuito contra la LGBTI-fòbia.

• Los circuitos son protocolos que ponen en contacto, además, varias instituciones para facilitar el abordaje del caso.

En Barcelona: Hay algunos gimnasios exclusivos para mujeres, que fomentan un entorno seguro para las usuarias. Sin embargo, la oferta es escasa y concreta, de centros de yoga, clubs, o espacios para hacer un deporte específico.

¿Qué puedes hacer ante las miradas asediantes de hombres en el gimnasio? Así pues, si sufres este tipo de acoso, o cualquier otro, puedes dirigirte a tu persona de referencia en el gimnasio, ya sea entrenadora, profesora, recepcionista, o personal diverso.

• Esta te derivará al delegado responsable de atender el acoso y velará por tu comodidad y seguridad.
• Desde el gimnasio activarán el protocolo y tomarán las medidas pertinentes.