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Monarquía

Corinna Larsen confiesa cuál es el gran problema de Juan Carlos: el alcohol

Barcelona.
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La empresaria alemana habla en el último episodio de su pódcast de la polémica cacería de elefantes de Juan Carlos en Botsuana, el año 2012, por la cual pagó cerca de 50.000 euros. Un safari que se produjo en un momento muy delicado: en plena crisis económica y cuando se había destapado el escándalo de Iñaki Urdangarín.

¿Qué sabemos? La que fuera amante del emérito recuerda en el último episodio de su pódcast, titulado Matar a Dumbo, el viaje que ella, su hijo Alexander, su exmarido Adkins y Juan Carlos hicieron hasta Botsuana. Una polémica escapada donde el emérito sufrió una fuerte caída durante la noche. Una caída con la cual se rompió la cadera y fue trasladado de urgencia hasta Madrid, con el avión de Corinna, para poder ser operado.

¿Qué ha dicho? Corinna se ha desahogado como nunca recordando la escapada a África que hizo con el emérito. Un viaje que fue el detonante de que saliera a la luz su relación con Juan Carlos. Una relación que duró ocho años, desde el 2004 hasta el 2012.

  • "La caída se produjo de madrugada, después de una larga noche de vino y copas".
  • "Salió de la tienda, con muchos problemas para mantener el equilibrio, para ir al baño".
  • "De camino tropezó con la raíz de un árbol o una piedra y cayó al suelo".
  • "La caída fue muy fuerte y el equipo de seguridad que había allí fue corriendo a ayudarlo y llevarlo de nuevo a la cama".
  • "Cuando le pregunté qué había pasado me dijo que no se acordaba, pero que tenía mucho dolor".
  • "El alcohol le había nublado la memoria y efectivamente Juan Carlos se había caído".
  • "Mi primera reacción fue pedir un avión porque teníamos el jefe de estado con hemorragias internas".
  • "Él negaba todo el rato y decía que no. Me preguntó si podíamos utilizar mi avión porque utilizar un vuelo de evacuación médica generaría mucho alboroto".

Además: Finalmente Juan Carlos, explica Corinna, fue evacuado en su jet privado hasta Madrid para ser operado de urgencia. Un vuelo de vuelta en el que el emérito siguió haciendo de las suyas. Y es que a pesar de la medicación que estaba tomando por el dolor, Juan Carlos, afirma Corinna, no dejó de beber alcohol en ningún momento. Tanto es así que Corinna intentó que el emérito dejara de consumir, pero no hubo manera. "Yo soy el rey de España y hago lo que me da la gana", dijo el monarca.

Por último: Juan Carlos fue operado en el Hospital Quirónsalud San José de Madrid, donde le pusieron una prótesis en la cadera derecha. El emérito estuvo ingresado durante varios días, recibiendo las visitas tanto de Corinna como de su mujer Sofía. Aunque en los pasillos del centro médico se hacía todo el posible para que las dos mujeres no coincidieran. A la salida del hospital Juan Carlos pronunció la célebre frase: "Lo siento mucho, me he equivocado y no volverá a ocurrir".

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