La última de Urdangarin: se enroca y pone problemas para que no le retiren la escolta
Iñaki Urdangarin no quiere perder la escolta. Coincidiendo con el divorcio con la infanta Cristina, se ha sabido que el Ministerio del Interior ha iniciado los trámites para retirar a los agentes de seguridad que lo protegen. Pero él se resiste.
¿Qué sabemos? Según ha adelantado este jueves el portal Vanitatis, el Gobierno ha topado con problemas cuando ha intentado retirar el servicio de agentes de la Policía Nacional, que pertenecen a Casa Real y que actualmente trabajan con Urdangarin.
- Asegura el digital que nadie hasta ahora se ha atrevido a firmar la documentación para retirar la escolta.
- Además, Urgandarin no pone las cosas fáciles y él mismo ha expuesto ya que no quiere renunciar.
- Los escoltas tampoco quieren dejar su trabajo al lado de Urdangarin.
Al detalle: Se trata de los mismos agentes (entre cuatro y ocho) que en 2020 generaron un montón de comentarios porque se encargaban de comprar la comida de Urdangarin y llevársela a la oficina para que no tuviera que salir a la calle. También lo ha hecho en Ginebra, cuando les ha hecho ir a comprar pizzas.
- Unos escoltas que habitualmente hacen este tipo de trabajos para los miembros de la familia real. Por ejemplo, en el caso de la infanta Elena han llegado a ir a comprar lana para que pueda coser en casa.
Además, la misma publicación apunta que Urdangarin tampoco querría perder el servicio de escolta porque es una forma de disuadir a la prensa cuando busca momentos de intimidad con su pareja, Ainhoa Armentia.
Para acabar: Cuándo hace más de un año que se sabe que Iñaki Urdangarin tiene una novia nueva, la infanta Cristina y él se encuentran ya inmersos de lleno en el proceso de divorcio. Firmarán los papeles el próximo mes de abril, y ella le pagará una pensión de 25.000 euros en el mes con una condición: que se mantenga fiel a la cláusula de silencio, por la cual se compromete a no hacer pública ninguna intimidad de la familia real española.
