Los audios de la madre de Luis Rubiales desde la iglesia: "No puedo ver a nadie"
Ángeles Béjar continúa la huelga de hambre en una iglesia de Motril para pedir justicia para su hijo, Luis Rubiales. Atrincherada desde el lunes, en las últimas horas se han filtrado los mensajes de voz que ha enviado a una amiga con el teléfono.
¿Qué sabemos? Este martes por la tarde, una amiga de Ángeles Béjar se acercaba a la parroquia de la Divina Pastora de Motril, pero ante la imposibilidad de visitarla le envió audios de WhatsApp desde fuera del edificio. Desde el interior, la madre de Rubiales respondía y los periodistas presentes en el exterior captaban sus mensajes.
¿Qué dice Ángeles Béjar? En plena protesta, la madre de Rubiales decía en dos grabaciones que la gente de fuera no podía acceder a la iglesia. "A las ocho hay misa y me apartaré. Entrará una persona tras otra, y no estoy en condiciones porque llevo todo el día sin comer. Procuraré estar tranquila", expresaba en el primer audio. En el segundo, Ángeles Béjar pedía a su amiga que impidiera que nadie fuera a verla: "Si ves que alguien quiere venir, dile que no. No puedo ver a nadie, me lo ha prohibido el médico".
¿De dónde venimos? La madre de Luis Rubiales aseguraba el lunes, antes de iniciar la protesta, que su hijo está sufriendo una "cacería inhumana y sangrienta que no merece", y por eso dice que se mantendrá día y noche en la iglesia haciendo huelga de hambre hasta que se haga justicia. También ha reclamado a Jennifer Hermoso, la futbolista que recibió el beso sin consentimiento, que "diga la verdad". Considera que "no existe abuso sexual al existir consentimiento por ambas partes" y se pregunta "por qué se están ensañando tanto con él".
Además, en las últimas horas El programa del verano de Telecinco ha emitido otras declaraciones muy comentadas de Ángeles Béjar al día siguiente de empezar su encierro. Después de reiterar que quiere que Hermoso "diga la verdad", aseguraba por mensaje de texto que está dispuesta a llegar hasta el final por Luis Rubiales: "Estoy bien, quiero rezar, creo mucho en Dios y pido la verdad. Estaré aquí hasta que mi cuerpo aguante, no me importa morir por la justicia porque mi hijo es una persona decente".
