Política
El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena
Foto: El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena | Europa Press
Exilio

La Fiscalía no convence a Llarena, que rechaza acusar a Puigdemont por desórdenes

El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena
Foto: El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena | Europa Press

El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, no hará caso a la Fiscalía y evita acusar Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí por un delito de desórdenes públicos agravados, como sí quieren los fiscales del proceso, una voluntad expresada en un auto presentado este martes.

¿Por qué es importante? El magistrado que investigó los hechos del proceso de 2017 rechaza el criterio de los fiscales y solo reclamará a los tres líderes independentistas por desobediencia y malversación, según avanza este miércoles TV3.

¿De dónde venimos? La semana pasada, con la entrada en vigor de la reforma del Código Penal que eliminaba el delito de sedición, Llarena modificó las acusaciones contra el expresidente y los exconsellers y decretó nuevas órdenes de detención e ingreso en la prisión para los 3.

  • Los 4 fiscales de la sala de lo penal del Tribunal Supremo expresaban este martes que los hechos de la sentencia del proceso de 2019 apunta a "hechos tumultuarios con resultado de alteraciones graves del orden público, dificultades y cortes en la circulación, invasión de instalaciones y edificios con afectación grave del funcionamiento de la administración de justicia y de los servicios esenciales".
  • Para los fiscales, los hechos de septiembre y octubre del 2017 fueron los que constituyeron el delito de sedición y ahora constituyen el de desórdenes.

Sin embargo, en el auto de la semana pasada, el juez Llarena considera que los hechos de octubre de 2017 no encajan con un delito de desórdenes públicos.

¿Qué dicen los fiscales? Critican que se haya eliminado la sedición del Código Penal porque supone "eliminar uno de los instrumentos penales de respuesta ante agresiones a la orden constitucional y debilitar su adecuada protección".

  • No obstante, estos argumentos no habrían convencido a Llarena.

¿Y el resto de exiliados? La Fiscalía y el juez del Supremo mantienen sintonía en los casos de Puig y Rovira, pero discrepan con Ponsatí.

  • Lluís Puig: Llarena lo acusa por malversación agravada y desobediencia.
  • Marta Rovira: Está acusada de desobediencia, por lo tanto, esquivaría la prisión.
  • Clara Ponsatí: Los fiscales también querían acusarla de desórdenes públicos agravados, pero Llarena mantendrá la desobediencia. Así, como Rovira, evitaría la prisión.