Albert López reconoce el crimen de la Guardia Urbana por poder salir de la cárcel
Albert López, condenado por el conocido crimen de la Guardia Urbana, junto a Rosa Peral, ha reconocido los hechos "ninguno aparecen en la sentencia" para poder conseguir permisos y salir de prisión unos días.
Situación actual. Según explica El Periodico, Albert López habría reconocido que mató a Pedro junto a Rosa Peral.
- Así lo ha hecho "siguiendo el consejo de su abogado", según fuentes judiciales, y la Junta de Tratamiento de la cárcel en la que cumple condena.
- De esta forma, con el reconocimiento Albert puede acceder a los cursos penitenciarios por delitos violentos, que es una de las condiciones para tener permisos y poder salir de prisión unos días dentro de un proceso de reinserción.
Paralelamente, según el citado rotativo, Rosa Peral cumplió el pasado año una cuarta parte de la condena impuesta y también pide salir de prisión.
- Según explicó su abogada, lo hizo cada tres meses, pero le rechazaron, ya que ella no admitió los hechos.
¿De dónde venimos? De hecho, en enero de 2024 Peral volvió a sentarse en el banquillo de los acusados. Esta vez declaró por un presunto delito de ocultación de bienes.
- La justicia acusa a Peral de ocultar su patrimonio para intentar no indemnizar a los familiares de la víctima de su crimen, su expareja Pedro.
- Según la juez del caso, Rosa habría cedido su casa a Vilanova y la Geltrú (Barcelona) a su padre antes de que la condena fuera firme.
El crimen de la Guardia Urbana. El crimen de la Guardia Urbana dejó en todo el país atento a los avances de la investigación, que protagonizó los temas de los informativos durante meses, tras encontrar el 4 de mayo del 2017 el cadáver de Pedro Rodríguez, un agente de la Guardia Urbana de Barcelona.
- El juicio con jurado popular comenzó el 3 de febrero del 2020, donde Rosa Peral, la esposa de la víctima, y Albert López, su amante, estaban acusados de haber matado al agente en la madrugada del 1 de mayo de 2017.
- En el juicio, los acusados se acusaron mutuamente. Ella le acusaba de matarle por celos y él de haberle matado ella y pedirle que le ayudara a deshacerse del cadáver.
- A finales de marzo del 2020, ocho de los diez miembros del jurado popular consideraron a ambos culpables, y el juez los condenó a 25 y 20 años de cárcel. A ella cinco años más por agravamiento de parentesco.