El IPC cae en Catalunya y se sitúa en 1,9% en junio, pero con los alimentos más caros

El Índice de Precios al Consumo (IPC) ha bajado más de un punto en junio en Catalunya y se ha situado en el 1,9% en comparación con el mismo mes del año pasado.

¿Por qué es importante? Se trata de la variación interanual más baja de los últimos dos años y supone que el indicador encadene dos meses consecutivos de bajada.

¿Qué sabemos? Los datos de Catalunya han coincidido con los del Estado, donde el IPC también ha situado la variación interanual en el 1,9% y la mensual en el 0,6%.

• El INE ha atribuido la bajada al descenso del precio del transporte -sobre todo los carburantes- y los alimentos -en especial las frutas, los cereales y la carne.
• Con respecto a la inflación subyacente, que descuenta los precios más volátiles, en el Estado también se ha situado en el 5,9%. De esta manera, encadena bajadas desde el mes de febrero.

Previsiones: Cuando el indicador de la inflación subyacente se sitúe por debajo del 5,5%, el Gobierno eliminará la rebaja del IVA de los alimentos básicos.

En cambio: A pesar de encadenar tres meses de bajadas interanuales, los alimentos todavía continúan disparados respecto hace un año.

• Durante junio han sido un 10% más caros que el mismo mes del año pasado. En comparación con mayo, el precio ha subido un 0,2%.

El precio de los alimentos:

• Ha continuado disparado el precio del azúcar (49,3%), la leche (19,9%), las patatas (20,5%), la carne de cerdo (14,2%), los cereales (13,5%), el aceite y las grasas (13,3%), los huevos (12,5%), el agua y los refrescos (12%) y el café (9,6%).
• Respecto a mayo, los productos que más se han encarecido han sido las patatas (4,8%), el aceite y las grasas (2,8%), la fruta fresca (1,2%), la carne de cerdo (0,8%), los cereales (0,6%) y el pescado (0,4%).
• En cambio, el precio de las legumbres y las hortalizas frescas ha bajado un 4,3%.

Además: Los datos también constatan un encarecimiento de los productos y servicios relacionados con el turismo.

• Los paquetes turísticos son un 23,6% más caros que hace un año, los servicios de alojamiento se han encarecido un 12%, los restaurantes y los hoteles un 6,3%, y el ocio y la cultura un 5,9%.